El próximo Jueves 19 de Enero The Bus celebra su 2º ANIVERSARIO!!! Ya son 2 años repartiendo BASS y dando cabida a los mejores artistas de la escena actual de la bass music!!! Y para una ocasión tan especial tenemos el lujo de poder contar con DIPLO!!! un gran invitado que se sabe mover por diferentes estilos como pez en el agua, desde la cumbia, el kuduro, el dubstep hasta el punk y más allá! Le acompañarán en esta noche de celebración el gran CARDOPUSHER y nuestros queridos MACHINE .
DIPLO
A pesar de la eterna polémica de si los DJ's deben o no considerarse músicos, lo cierto es que Diplo podría ser una excepción a la regla dado a que su trabajo, además de la mezcla y el movimiento de perillas, está marcado por la versatilidad y vanguardismo.
Casi como un curador dedicado a investigar sonoridades periféricas. Algo así como un antropólogo del ritmo, que lo ha hecho instalarse en los suburbios de Rio de Janeiro primero y Kingston después, Diplo ha sabido hilvanar sonidos tan dispares como el hip hop del sur de Filadelfia con el dubstep jamaiquino y el baile funk carioca con sonidos indopaquistaníes.
En la Rocinha (la favela más grande de Brasil) vivió durante casi un año, se empapó de la cultura “funk carioca” y hasta grabó el premiado documental “Favela on Blast”. Produjo a artistas como M.I.A., Bonde do Rolé y Buraka Som Sistema, que hicieron de las “batidas” cariocas un sonido tan cool y pachanguero que hasta la propia Paris Hilton los consideró “hot”.
En los guetos de Kingston hizo algo parecido. Recuperó las raíces de sonidos sesenteros como el dub jamaiquino y lo fusionó con el drum n'bass en Major Lazer, proyecto compartido con DJ Switch y con quien vendría a Chile.
Y aunque dice que es “difícil para un blanco de Filadelfia hacer música de raíz reggae”, Diplo no se puede quejar. Además de productor, DJ y director de cine, es dueño del sello Mad Decent donde aloja a artistas que van del reggaetón al kuduro. Tal vez por su pasado como profesor, o mera curiosidad, el verdadero éxito de Diplo radica en haber sabido descubrir sonidos que habían estado encerrados en “pequeños” guetos y dispersarlos con su toque personal a las pistas del mundo.
Casi como un curador dedicado a investigar sonoridades periféricas. Algo así como un antropólogo del ritmo, que lo ha hecho instalarse en los suburbios de Rio de Janeiro primero y Kingston después, Diplo ha sabido hilvanar sonidos tan dispares como el hip hop del sur de Filadelfia con el dubstep jamaiquino y el baile funk carioca con sonidos indopaquistaníes.
En la Rocinha (la favela más grande de Brasil) vivió durante casi un año, se empapó de la cultura “funk carioca” y hasta grabó el premiado documental “Favela on Blast”. Produjo a artistas como M.I.A., Bonde do Rolé y Buraka Som Sistema, que hicieron de las “batidas” cariocas un sonido tan cool y pachanguero que hasta la propia Paris Hilton los consideró “hot”.
En los guetos de Kingston hizo algo parecido. Recuperó las raíces de sonidos sesenteros como el dub jamaiquino y lo fusionó con el drum n'bass en Major Lazer, proyecto compartido con DJ Switch y con quien vendría a Chile.
Y aunque dice que es “difícil para un blanco de Filadelfia hacer música de raíz reggae”, Diplo no se puede quejar. Además de productor, DJ y director de cine, es dueño del sello Mad Decent donde aloja a artistas que van del reggaetón al kuduro. Tal vez por su pasado como profesor, o mera curiosidad, el verdadero éxito de Diplo radica en haber sabido descubrir sonidos que habían estado encerrados en “pequeños” guetos y dispersarlos con su toque personal a las pistas del mundo.
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