sábado, 28 de abril de 2012

Origen del himno de España



Cuenta Luis Carandell en su obra “Las anécdotas de la política”, cómo a su vez don Benito Pérez Galdós narra en sus memorias cómo llego a España la Marcha Real, el himno vigente. Al parecer, la cuestión viene de una reunión del rey de Prusia Federico “El Grande” con el embajador del rey Carlos III de España en sus dominios, el marqués de Sotomayor. En un momento de la reunión, el embajador español comentó:
―Sire, mi augusto soberano desea que vuestra majestad se digne informarle de la táctica que ha usado en sus gloriosas campañas militares para que sirva de norma a nuestros ejércitos.
El rey prusiano, burlón, sonriente y quizás hasta con algo de mala leche, contestó:
―Pero, señor embajador, ¡si mi táctica es la española! La aprendí en la magna obra del marqués de Santa Cruz de Marcenado que usted, como general, conocerá sin duda.
El embajador español se quedó un poco turbado y sorprendido por la respuesta del rey, y cuando comenzaba su réplica, el rey quiso acabar con el lío, que él mismo había provocado y que tenía al marqués un poco avergonzado. Federico de Prusia, “El Grande”, cogió de la mesa junto a la que estaban conversando una partitura y se la entregó al marqués para cambiar de tema de conversación.
―Esta es una marcha compuesta por un gran músico alemán. Yo la considero obra maestra por su brevedad, solemne y grandiosa. Llévela usted de mi parte a su majestad católica parea que la adopte como himno en los actos palatinos.

Y así acabó la partitura del himno de España en las manos de Carlos III, que hizo caso a la petición del prusiano. Así lo cuentan Carandell y Galdós, que no son mancos en estas cosas, pero también se dice que fue un regalo del rey prusiano a su sobrina María Amalia de Sajonia por su boda.

Fuente : Las anécdotas de la política, de Luis Carandell

No hay comentarios:

Publicar un comentario